jueves, 22 de septiembre de 2016

¿Sabes Que Es La Resiliencia, Y Como Involucra A Las Adolescentes Embarazadas?




 La resiliencia es la capacidad de los seres vivos para sobreponerse a períodos de dolor emocional y situaciones adversas. Cuando un sujeto o grupo es capaz de hacerlo, se dice que tiene una resiliencia adecuada, y puede sobreponerse a contratiempos o incluso resultar fortalecido por estos. Actualmente, la resiliencia se aborda desde la psicología positiva, la cual se centra en las capacidades, valores y atributos positivos de los seres humanos, y no en sus debilidades y patologías, como lo hace la psicología tradicional. El concepto de resiliencia se corresponde aproximadamente con el término «entereza»
Medición de la Resiliencia
Hoy en día hay una gran variedad de Test de Resiliencia que intentan medir este constructo. La discusión se aclaró en el 1er Congreso Mundial de Resiliencia realizado en Paris en febrero del 2012, donde quedó claro que la Resiliencia era un constructo de ocho pilares con el que nacen todos los seres vivos para poder alcanzar su propio bienestar. De allí que el instrumento más confiable será el que valore estas variables: Autonomía, Afrontamiento, Autoestima, Conciencia, Responsabilidad, Esperanza/Optimismo, Sociabilidad inteligente y Tolerancia a la Frustración, tal y como lo hace el Instituto Internacional de Investigación para el Desarrollo (IIID - www.iiid-la.org) con su insturmento llamado Test IAR aplicado en Latinoamérica. Así lo está promoviendo el PNUD desde el 2014 para la erradicación más eficaz de la pobreza. El Test IAR está desarrollado para corroborar la existencia de Anomia asiliente y de Resiliencia en sus diferentes niveles. Fue expuesto por primera vez en el 2º Congreso Internacional sobre Paz, Democracia y Desarrollo por el Dr. Dagoberto Flores Olvera y publicado en las memorias correspondientes. Es el primero y uno de los mejores métodos para diagnosticar la resiliencia y su opuesto la anomia asiliente.

Síntomas depresivos y resiliencia en adolescentes embarazadas

El embarazo en la adolescencia se considera como una complicación en el proceso de maduración orgánico y emocional de la joven, puesto que altera o interrumpe su educación formal, repercute negativamente en su salud (presente y futura), favorece la pobreza, crea problemas para el hijo y para futuros embarazos, entre otros resultados negativos. Un estudio conjunto de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil (Ecuador) y la Universidad de Zaragoza (España) ha investigado las diferencias entre adolescentes y jóvenes adultas embarazadas.4 Un 56 % de las embarazadas estudiadas tuvieron resultados sugestivos de depresión usando el instrumento CESD-10, aunque los resultados no fueron diferentes para los dos grupos etarios estudiados. Las embarazadas adolescentes tuvieron menor resiliencia y mayor tasa de valores por debajo de la mediana (P< 0.05). En el análisis de regresión logístico no se pudieron establecer factores de riesgo diferentes para el estado depresivo. Sin embargo, los niveles de resiliencia se asociaron con tener una pareja adolescente y tener un parto pretérmino.

Categorización

De este modo se categorizan los sujetos en no-resilientes y pro-resilientes, existiendo una graduación intermedia. Se observa que a mayor actividad cognitiva y a mayor capacidad intelectual aumenta la resiliencia, no sólo emocional, sino de las neuronas de los sujetos. Ciertamente que no es absoluta la relación «mayor nivel intelectual = mayor resiliencia», pero estadísticamente es muy frecuente. El sujeto con mayores conocimientos y mayor capacidad intelectual puede procesar y elaborar más eficazmente los traumas y los factores distresantes.

Ante situaciones de catástrofe (natural o provocada por el ser humano) se debe considerar la formación de las llamadas «comunidades resilientes» y para éstas un tratamiento específico. Teniendo en consideración que la resiliencia psíquica es el resultado de múltiples procesos que contrarrestan las situaciones nocivas, se trata de una dinámica en la cual se podrían señalar las siguientes etapas:

El equilibrio que enfrenta a la tensión
El compromiso y el desafío
La superación
La significación y valoración
La positividad de sí mismo
La responsabilización
La creatividad
Clínicamente se hace una diferenciación neurobiológica entre las personalidades no-resilientes y las pro-resilientes en situaciones de estrés postraumático. En los sujetos no-resilientes o poco resilientes se observan fenómenos llamados de alta call memory; tal call memory se define por la frecuencia e intensidad en que se reactiva en la memoria consciente el momento traumático o altamente distresor. Desde la perspectiva clínica, tales reminiscencias traumáticas se pueden presentar como flash-backs o como pensamientos intrusivos, siempre de modo compulsivo.

La investigación neurológica ha demostrado que tales evocaciones del trauma se generan con activaciones autónomas de diversas partes del cerebro, en especial las de la memoria y las de vigilancia, es decir, regiones del cerebro tales como los núcleos de la amígdala, el lugar azul o locus cerúleo, el hipocampo, y luego el neocórtex.

Las personas resilientes ha sido definidas con las siguientes características:

Sentido de la autoestima fuerte y flexible
Independencia de pensamiento y de acción
Habilidad para dar y recibir en las relaciones con los demás
Alto grado de disciplina y de sentido de la responsabilidad
Reconocimiento y desarrollo de sus propias capacidades
Una mente abierta y receptiva a nuevas ideas
Una disposición para soñar
Gran variedad de intereses
Un refinado sentido del humor
La percepción de sus propios sentimientos y de los sentimientos de los demás
Capacidad para comunicar estos sentimientos y de manera adecuada
Una gran tolerancia al sufrimiento
Capacidad de concentración
Las experiencias personales son interpretadas con un sentido de esperanza
Capacidad de afrontamiento
Apoyo social
La existencia de un propósito significativo en la vida
La creencia de que uno puede influir en lo que sucede a su alrededor
La creencia de que uno puede aprender con sus experiencias, sean éstas positivas o negativas
Se ha demostrado que la Resiliencia nómica es lo opuesto a la Anomia asiliente, como lo presenta el Dr. Flores Olvera (2015) en su obra Resiliencia nómica. La anomia asiliente es una actitud enferma, una conducta desviada de la norma, que se caracteriza principalmente por transformar la visión real de sí mismo, por una visión errónea. Siendo capaz, demuestra la incompetencia del individuo y del grupo social para resolver problemas y para alcanzar un alto estándar de vida. Hace que se obtengan resultados negativos ante la adversidad. La anomia asiliente social es producida por los cambios estructurales que forman diferencias, marginación y exclusión social, racial y étnica. Podría ser lo opuesto de la resiliencia social y llamarse asiliencia social. Forma la creencia de que no se puede lograr realizar o alcanzar satisfacer la mayoría de las necesidades o motivaciones humanas, cuando en realidad sí se puede. La creencia de ser incompetente ante la adversidad sin serlo. Se considera el concepto de anomia asiliente como una transformación importante que afecta directa y negativamente al desarrollo socioeconómico de grandes grupos sociales (Flores, 2006).

Esta forma de anomia es relacionada con la "Resiliencia". Específicamente con la Resiliencia (psicología) concebida en la psicología. Aunque en estos tiempos los estudiosos del habla inglesa proponen una diferencia entre "resilience" y "resiliency". Parecida a como lo proponen entre "freedom" y "liberty". El primer concepto se refiere al proceso que es calificado como resiliente. El segundo, se refiere al estado de resiliencia. Sobre este respecto hay aún discusiones encontradas en las literaturas recientes. En español aún no se encuentra una explicación que haga esta diferencia. La relación de la anomia asiliente con la resiliencia, amplía comparativamente la propuesta de resiliencia. En Latinoamérica no se puede explicar la Resiliencia sin considerar la Anomia asiliente. Es una de las visiones que tiene ahora el PNUD en su Informe sobre Desarrollo Humano 2014, donde urge a promover la RESILIENCIA de forma global, especialmente con los menos desarrollados y más vulnerables. En el hogar, la escuela, las empresas y con voluntad política.

Boris Cyrulnik (1999) considera que no se puede ser resiliente uno sólo cuando desde temprana edad se ha disminuido su nivel, pues la resiliencia se hace florecer en interacción con el entorno y con el medio social. Aunque se considera que todos nacemos con resiliencia, esta va siendo disminuida por los padres y maestros de los 2 a los 19 años de edad, convirtiéndola en anomia asiliente. La resiliencia es ahora de interés de la sociología, la antropología, la psicología social y la psicología positiva.

Más recientemente Murray (2003), define la resiliencia como una actitud que permite resultados positivos al individuo ante la adversidad, sin importar cuán difícil sea. Respondiendo o afrontando exitosamente a la adversidad y a todos los problemas de la vida, desarrollando fortalezas para resistir a la adversidad. Aclara que no debe confundirse con resistencia, la cual puede ser un rasgo de la anomia asiliente. Y tampoco confundir el enfrentar con el afrontar(resolver).

By Jhon Velasco

Toda Mujer Tiene Algo De Puta



La sociedad se ha convertido en la plaza donde se somete a la mujer al escarnio público cuando decide mostrarse tal y como es, expresando su sensualidad y deseos abiertamente. Puta es sinónimo de prostituta, mujer que cobra a cambio de sus servicios sexuales pero no todas las mujeres cobran. Puta le llaman a aquella mujer que decide pintarse los labios de rojo, que decide usar unas medias de encaje, que decide usar transparencias, que decide usar minifalda, que decide masturbarse, que decide tener sexo sin compromiso, que decide besar a quien le gusta; Pues si estas actitudes son características de una puta, entonces toda mujer tiene algo de puta.
El mundo está ávido de esas mujeres decididas, con personalidad, atrevidas, de mente abierta, mujeres seguras, extrovertidas y llenas de espíritu pero cuando una mujer hace lo que quiere (guardando las proporciones) aparece la doble moral de la que tanto nos quejamos pero hacemos parte; el hombre quiere una mujer que lo satisfaga pero si se comporta sin miedos y con los pantalones bien puestos para decirle al mundo lo que desean es tachada como puta, como un objeto sexual pero ellas también sienten y tienen el derecho a disfrutar de lo que desean y lo que quieren para sus vidas en cualquier ámbito tanto sexual como laboral y familiar.
Los hombres siempre están esperando tener una mujer para mostrar ante la sociedad y nos hemos encargado que la mujer ideal sea una madre abnegada, una esposa sumisa, una hija solapada, esa mujer intachable a la cual jamás se le relacionaría con algún acto carnal y es por culpa misma de las mujeres que el hombre las ha sometido a cumplir esos roles que aún son notorios después de 14 años de transcurrido del siglo XXI, porque muchas por ese miedo a ser tachadas de puta no expresan sus sentimientos y pensamientos libremente. Cada segundo en el mundo una mujer es victima de violencia, abuso o discriminación y aunque no hay ninguna razón valida tal acto, todos, hombres y mujeres deberíamos emprender acciones para que tales situaciones no ocurran mas y permitan la libre expresión de los deseos femeninos ante la sociedad.
Las mujeres de hoy en día no necesitan de un hombre para salir adelante ni para que las mantenga, son mujeres independientes que tienen los mismos derechos y deseos de un hombre y se consideran putas por disfrutar de su sexualidad libremente, pero las mejores putas son aquellas que se valoran más a sí mismas, que son capaces de tomar decisiones en pro de su bienestar, como sacar a un hombre de su vida que no le aporta nada bueno ni la complementa, que deciden acostarse con un hombre porque ellas quieren y no porque un hombre se los impone.
Hombres, valoren a esas mujeres con personalidad, valientes y decididas a vivir su vida sin tapujos ni miedos a ser juzgadas por sentir y vivir como les plazca, en busca del placer y su satisfacción personal. Mujeres, atrévanse a expresar su sensualidad y sexualidad libremente, vivan con el corazón y sean las mejores putas, llenas de virtudes, deseos, pasiones y sentimientos que no le hacen daño a nadie más que  a sí mismas si no los viven a plenitud.

fuente: noticia.life

jueves, 28 de abril de 2016

Permiso por ley para el matrimonio


Tener derecho a exigir licencia en ocasión del matrimonio de algún empleado o empleada, aunque parece una inquietud graciosa, propia de algún chiste de no muy buen gusto, es una inquietud más común de lo que parece. La única licencia obligatoria que debe conceder el empleador a sus trabajadores, es por calamidad doméstica, de suerte que si se quiere exigir alguna licencia, será invocando la calamidad doméstica, de lo contrario, el empleado deberá acogerse a la mera voluntad y liberalidad de su jefe, y si el empleador no le apetece dar una licencia, no habrá nada que lo pueda obligar. Y aquí viene el problema del matrimonio. Cuando un trabajador va a contraer matrimonio, naturalmente que necesita de algún tiempo de licencia; el problema es conseguir que el empleador le otorgue esa licencia. Por regla general, las empresas otorgan este tipo de licencias a sus empleados, y hasta les dan regalo o como mínimo su sentido pésame. ¿Pero qué hacer si el empleador decide no otorgarles alguna licencia o permiso? ¿Se puede, como algunos han propuesto, invocar la calamidad doméstica? El artículo 57 del Código sustantivo del trabajo, dice que el empleador deberá otorgar licencias al trabajador, “en caso de grava calamidad doméstica debidamente comprobada”. La ley, sin embargo no es ocupó de definir qué se debe entender por calamidad doméstica, así que será un poco complicado determinar qué casos o situaciones se deben considerar calamidad doméstica y por consiguiente ser objeto de la licencia obligatoria. Teniendo en cuenta la naturaleza del matrimonio y la misma naturaleza de lo que se entiende por calamidad, es seguro que no se podrá considerar como calamidad doméstica, aunque en el futuro las partes involucradas en el matrimonio, así lo llegaren a considerar. Estas situaciones, deberán ser consideradas en el reglamento interno del trabajo, y corresponde a los trabajadores negociar estas circunstancias, y una vez se logren pactar, será obligatorio para el empleador otorgar una licencia en ocasión del matrimonio de sus empleados. Mientras no exista algún pacto sobre el respecto, será el empleador quien voluntariamente otorgue o no licencia. Es recomendable, claro está, que dentro de las políticas de recurso humano de toda empresa, contemple licencias y tratos especiales los empleados que deciden contraer matrimonio.